Día de Todos los Santos

Este escrito, lo podrás leer en mi ya publicado libro.

Aquí irá el comentario de Clotilde Cruz Peña, al respecto de este escrito en particular de cómo se le ocurió, en qué momento, por qué razón, en fin, en plan anécdota que hace que este trabajo nos resulte más cercano al saber de antemano cuales fueron las circunstancias que la llevaron a ello.

DÍA DE TODOS LOS SANTOS

En el triste cementerio

me puse a considerar

y a descubrir el misterio

que hay en la eternidad.

Tristes y solos los muertos

en ese humilde lugar,

donde los cipreses yertos

nos muestran su soledad.

Miraba sus tumbas,

medité al momento,

¡Qué tristes y solos

se quedan los muertos!

Horrible silencio,

tremendo vacío

nos dejan los muertos,

mis seres queridos.

Agitaba el viento

con triste ulular,

entre aquel silencio

vuelvo a meditar.

La lluvia caía,

mojaba mi frente,

el viento traía

una voz inerte

que así me decía:

"¡No hay que atormentarse,

hay que ser valiente,

aunque no lo creas

nos llega la muerte!".

En aquellos nichos,

cubiertos de flores,

nos queda el recuerdo,

sus obras y honores.

Ya aquellos valores

son flor deshojada,

recuerda que un día

vuelves a la nada.

Triste más allá

que encierra el secreto

¡Dios mío, qué tristes

y solos se quedan los muertos!